Adiós Heriberto: más de cuatro décadas al servicio de la salud
Después de 43 años de labor en la pesquisa del cáncer cérvico uterino, el tecnólogo médico Heriberto Opazo se jubiló. El viernes salió por última vez del Hospital Regional.
Eran las 16:59 horas del pasado viernes 2 de julio y justo cuando quedaban sólo 10 segundos para las cinco de la tarde, Heriberto Opazo estaba listo para poner su dedo en la máquina de control de ingreso y salida del Hospital Regional de Antofagasta (HRA) y así finalizar su jornada laboral.
Lo mismo ya venía haciendo en los últimos 43 años, pero esta vez había algo especial: esa fue la última ocasión en que Heriberto terminaba su turno y lo hizo en medio de la cuenta regresiva que llevaban sus compañeros de trabajo. "Cinco...cuatro...tres...dos...uno". Comenzaron los aplausos: el tecnólogo médico con más de cuatro décadas de servicio finalmente se despedía de la vida laboral, para dar paso a la jubilación.
Heriberto dijo adiós entre algarabía y agradecimientos, luego de haber cumplido su labor en la Unidad de Anatomía Patológica del HRA. "Exactamente trabajé 43 años trabajé para el HRA. Estoy cumpliendo esta etapa que se veía lejana, pero todo llega", decía el profesional en la ceremonia de despedida.
Las cuatro décadas se mantuvo trabajando en aquella unidad de anatomía patológica y si bien se desempeñó en varias funciones durante todo ese tiempo, una de las más recordadas fue la labor que cumplió en ayudar a mujeres en la detección del cáncer cérvico uterino:
"Mi función dentro de la Unidad de Anatomía Patológica fue también liderar el equipo del Laboratorio de Citología, que básicamente es los informes de los papanicolau que resultan en la pesquisa precoz del cáncer cérvico uterino, que en esta región es una patología con alto índice. Entonces, nuestra función principal era llegar a la mayor cantidad de mujeres para que se les tomara ese PAP y poder pesquisar alguna lesión precancerosa, que es lo que persigue ese examen, lesiones iniciales antes que sean cáncer".
Heriberto señala que en todos estos años se lleva el recuerdo y el cariño de "la gente que conocí. En estos cuarenta y tantos años me involucré con mucha gente. Noté el aporte que hace cada uno en sus trabajos por la salud de la región. El personal se entrega por dar lo mejor de cada uno".
Finalmente, ahora ya pensando en el presente y futuro, dice que tras toda una vida de trabajo será el tiempo de "buscar algún hobbie para que llene mi tiempo libre. También reintegrarme a cursos que me gustaban mucho de filosofía que yo siempre los tomé y los seguí, así que pienso seguir esa senda... Y viajar."
"Me quedó con la gente que conocí. En estos cuarenta y tantos años noté el aporte que hace cada uno por la salud de la región"
Heriberto Opazo, en su despedida-
Homenaje
Las jefaturas de Heriberto quisieron compartir palabras, destacando su labor en más de cuatro décadas. Así, el jefe de Anatomía Patológica, el doctor Hugo Benítez, dijo: "es un funcionario que se ha destacado siempre por su compromiso y responsabilidad dentro del hospital. Hoy han llegado una cantidad mayor de citólogos y citotecnólogos que él ha ayudado a formar con su paciencia y buena voluntad".
"Heriberto ha estado al pie del cañón durante 40 años trabajando por la salud de las mujeres en la región y por lo tanto, indudablemente tenemos que rendirle homenaje y además despedirlo con todo el cariño del mundo porque no es sólo nuestro compañero de trabajo, sino que también es nuestro amigo", señaló además la supervisora de la misma unidad, Roxana Parra.