Foto denuncia: Faltan semáforos
La esquina de las calles Ossa, Coquimbo y O'Higgins se ha transformado en muy peligrosa para los peatones, pues faltan algunos semáforos para cruzar. Hay que "adivinar" para saber si a la persona le toca o no pasar.
La esquina de las calles Ossa, Coquimbo y O'Higgins se ha transformado en muy peligrosa para los peatones, pues faltan algunos semáforos para cruzar. Hay que "adivinar" para saber si a la persona le toca o no pasar.
El usuario @antofa_turismo señala en twitter: "Con una bella postal de Plaza Colón #Antofagasta, le damos la bienvenida a la primavera ¡Todos volvemos a florecer! #DisfrutaAntofagasta #LaPerlaVuelveABrillar".
Señor director:
Que una potencia como Estados Unidos haya proyectado para el año 2050 que el 45% de su consumo eléctrico se base en energía solar parece una quimera. Pero no lo es.
Porque en la ecuación para estimar qué tan lograble es esa meta no solo hay que considerar que la demanda de energía crece, sino que también lo hace la capacidad instalada de plantas fotovoltaicas cada vez más numerosas, y el avance tecnológico que hoy ya posibilita, por ejemplo, la implementación de paneles bifaciales, que captan más energía en los mismos metros cuadrados.
En Chile la expectativa es todavía más auspiciosa, ya que nuestro país -en su escala- tiene la mejor radiación solar del mundo, una demanda energética menor a la de potencias mundiales y un entorno regulatorio que propicia la llegada de inversiones para desarrollar no solo proyectos solares, sino que también ya se posiciona como polo de desarrollo para el hidrógeno verde.
Esto no solo muestra la fuerza con que crece esta industria, sino que también la oportunidad que entrega a Chile para seguir cumpliendo el objetivo de ser cada vez más verde y con una matriz basada completamente en fuentes limpias.
Víctor Opazo Carvallo
Chile celebró sus Fiestas Patrias. Fechas que resaltan las tradiciones típicas que alimentan el sentimiento de chilenidad. Ahora bien, ¿nuestros discursos de "identidad nacional" pueden excluir (de manera intencional o no intencional) a aquellos que comparten nuestro territorio, como las personas migrantes?
Las redes sociales se han convertido en el principal espacio para compartir información, comunicarse, formular una opinión, etcétera. Lamentablemente, estas plataformas también se han utilizado cada vez más para la propagación de la intolerancia y discursos de odio.
Frases como ¿Y por qué no se devuelven a su país? o ¡Chile es para los chilenos! no hacen otra cosa que reflejar un nacionalismo tóxico. Lamentablemente, una reacción común muchas veces, por parte de los espectadores, es no tomar ninguna medida, lo que alimenta la generación o consolidación de un discurso público de odio hacia este grupo.
El discurso del odio es una amenaza para los valores democráticos, la estabilidad social y la paz de cualquier nación. La invitación es que, más allá de las celebraciones del "18", no nos nublemos en la construcción de un país que debiera ser respetuoso del otro y socialmente más justo.