Cartas
Despiertan cada cuatro años
Estimado director:
A tres días de la elección siguen apareciendo un sinfín de personajes, como los de "las vueltas de carnero" (simples y las con mortal hacia atrás), "los promeseros de campaña" (presenciales y virtuales),"los arrepentidos" (ni ellos mismos se lo creen), "los brujos" (sin tarot, ni bolas de cristal, solo con encuestas), "los desenchufados" (por conveniencia), los "pasados de listos", que parece que creen que los chilenos somos "medios quedao" (para decirlo de una manera consecuente con la RAE), "los "expertos", que se las saben todas y si no las saben, las inventan, "los vacunadores" (especialistas en la 4ª dosis de refuerzo), "los mala memoria" (para algunas cosas), "los resucitados" (fans de The walking dead), por horas y días, los "requete repetidos", "los piérdete una", los "yo no lo haría", los "a mí que me registren", los "yo no estaba en esa fecha, yo no lo conocí y nunca lo vi" (seguidores de Pedro), los "eternos acomodados" (siempre a la hora y en el lugar más adecuado), y podría seguir...
Pero para el final, la novedad del año, como el juguete de moda para la Navidad, la aparición de "los descolgados", en todas sus variedades y colores a elección (las camisetas se venden por separado). En resumen, todo un grupo de personajes que se despiertan cada cuatro años, o cuando les conviene, en especial en épocas electorales.
"Hay dos palabras que ayudan a abrir muchas más puertas, Tire y Empuje".
Luis Enrique Soler Milla
Elecciones
Señor director:
Las elecciones son una película que cada cierto tiempo se reestrena. Solo cambian los actores. Son un escándalo y una mentira, y aunque toquemos madera, y elijamos a quien elijamos, nos lloverá sobre mojado y tropezaremos con la misma piedra.
Para los vencedores será la felicidad. Para los vencidos un adiós pampa mía. Y aunque se diga: cambia todo cambia, al final la vida sigue igual.
Jorge Valenzuela Araya