Redacción - La Estrella de Antofagasta
Cuarenta y nueve heridas cortopunzantes en la cabeza, tronco y extremidades presentaba el cuerpo de Luis Alfredo Pérez Rodríguez, la víctima del homicidio que este fin de semana se registró en el Pasaje Bonilla, extremo norte alto de Antofagasta.
Así lo informó el fiscal a cargo de la causa, Juan Castro Bekios, quien explicó que algunas de esas lesiones fueron penetrantes a la cavidad torácica y con daño pulmonar severo y que, además, el joven de 30 años y padre de cuatro pequeños sufrió un neumotórax bilateral y atelectasia masiva-pulmón de shock y, como condición contribuyente, una contusión craneana severa con contusión hemorrágica frontal derecha.
Esos fueron parte de los antecedentes que expuso ayer ante el Juzgado de Garantía, al vencer el plazo de ampliación de detención en 48 horas decretado el domingo para C.M.P.R. (42 ), quien fue aprehendido el sábado en calle Huasco de la población El Golf tras diligencias de carabineros de la sección 0S-9 y el Laboratorio de Criminalística (Labocar)
Contra el imputado el persecutor formalizó investigación como autor del delito de homicidio calificado, con alevosía y ensañamiento. Le comunicó, además, que se le sigue investigación por porte ilegal de arma de fuego solicitando su prisión preventiva por peligro para la seguridad de la sociedad, a lo que accedió el tribunal, decretando además un plazo de 120 días para el cierre de la investigación.
REncillas
Los hechos ocurrieron cerca de las 3.40 horas del sábado 8, cuando C.M.P.R. llegó premunido de un arma de fuego y otra cortopunzante hasta la casa de la víctima, ubicada a la altura del 9.000 del Pasaje Bonilla, casi esquina Mantos Blancos, insultándola de la calle y diciéndole que saliera a pelear. De ello da cuenta una grabación presentada por el fiscal, en la cual se escuchan las amenazas del imputado.
Luego el inculpado entró a la fuerza a la casa de la víctima y pese a disparar en varias oportunidades no hirió a Pérez Rodríguez. Sin embargo, la tragedia se desató cuando le asestó 49 puñaladas causándole las heridas que le costaron la vida.
En su relato, el representante del Ministerio Público dio cuenta de dos acciones: en la primera, lo agredió en varias oportunidades y se marchó, saliendo en gravísimo estado el joven a la puerta a pedir ayuda. En ese instante el imputado regresó, asestándole otras puñaladas a la víctima, que se desangraba.
De la agresión fueron testigos la madre, uno de los hijitos- de 4 años -del occiso y otros parientes que vivían con él, además de una sobrina del imputado y varios vecinos que despertaron con los gritos de C.M.P.R. y con los disparos que efectuó.
Los protagonistas del violento hecho eran vecinos y arrastraban rencillas de índole sentimental y en varias ocasiones se habían enfrentado. Todo- se indicó - comenzó cuando la exconviviente y madre de los cuatro hijos del fallecido inició una relación sentimental con el imputado, mientras el primero estaba preso.
4 hijos tenía la víctima, que murió tras sufrir 49 heridas cortopunzantes.