Joven calameño busca fomentar la música con talleres gratuitos
Dos veces por semana realiza clases de música y jazz en el Café Arte Vicente Huidobro y son abierto para todo público.
Desde siempre, Esteban Hinojosa ha estado ligado a la música. Su abuela era músico y dos de sus tíos siguieron esa misma senda.
Es por eso, que no era raro pensar que pudiera ser el otro artista de la familia. Pese a que desde muy chiquitito comenzó a tocar instrumentos, trató de relacionarse con otras áreas y una vez que decidió en qué estudiar, sus preferencias fueron marcadas por la presión social y familiar.
Fue así que decidió ser un abogado. Pero con el paso del tiempo, se dio cuenta que su vocación estuvo marcada en sus inicios. Lo músico lo llevaba en la sangre y tras ello, no pudo hacer nada.
En el 2011, ingresó a estudiar licenciatura en artes y tecnologías musicales, en la Universidad de Valparaíso y tras egresar, regresó a Calama, con la finalidad de apoyar a los jóvenes talentos de la zona.
Por iniciativa propia, llegó hasta la Corporación de Cultura y Turismo de Calama, donde pidió un lugar para impartir clases gratuitas de música.
Pero estas no eran enseñar a tocar instrumentos, sino más elaboradas. Pensadas en ayudar a los niños, jóvenes y adultos músicos en profesionalizar su trabajo y también su pasión.
Esteban, dicta clases los lunes de 19 a 21 horas en el Café Arte Vicente Huidobro, donde generalmente aparece un grupo de alumnos que vienen aprendiendo con él desde el mes de marzo, cuando se inició este taller de música.
A la fecha, no son más de diez los que lo siguen y con quienes ha avanzado en temas de lenguaje de música, partituras y escalas.
"Partimos como caballo inglés, porque llegó harta gente. Eran como 15 personas en promedio, las primeras clases, los primeros días y luego con el tiempo fue bajando la concurrencia, pero igual varía. Hay días en los que van 20 personas y otros que van seis, pero yo por lo menos, ya tengo un grupito de personas que van constantemente, que son los que han estado en todas las clases y los que están interesados", dijo este joven músico.
Sus principales interesados van desde los 14 años hasta los 50, por lo que son variados los públicos que llegaron a participar de este taller.
"Estos talleres parten con al iniciativa de que la gente calameña, el músico calameño tenga un lugar donde poder aprender y desarrollar el espacio musical visto desde la teoría musical, armonías, escalas, historia de la música y mejorar un poquito la comprensión musical de Calama", afirmó Esteban.
Para ello, este joven lleva seis meses compartiendo conocimientos que le fueron entregados en una educación formal, con personas talentosas, pero que no han tenido una formación profesional.
"Esto nace, porque soy nacido y criado acá y conozco más o menos el ambiente musical, hay súper buenos músicos, gente que toca súper bien, pero que le falta esa parte teórica para poder desarrollarse mejor. Hay mucho talento, pero que son puro oído", comentó este joven profesor.
Para él, lo importante es entregar un poco de ayuda y también de experiencia profesional a los músicos locales. Aseguró que comenzó siendo autodidactas.
"A mí también me pasó. Yo tocaba de puro oído y después cuando ya entré a estudiar tuve la opción de conocer el mundo académico, el lenguaje, aprender a escribir y leer música. Siento que es algo esencial para que el músico de acá sea tomado en serio y tenga un poquito más de desarrollo profesional", puntualizó Hinojosa.
El futuro
Sus clases han tenido buena aceptación por el público, pero también realiza clases particulares a quienes quieran aprender de música e instrumentos.
En sus ratos libres, se dedica a crear música y tocar. Sin embargo, también piensa en instalar una academia o instituto de música y artes, donde las personas puedan desarrollar la pintura, el teatro, la música, la literatura y todo en cuanto al área humanista.
También tiene claro que debe seguir especializándose en la música, por lo que su interés es el otro año o el subsiguiente realizar un magíster en composición y luego un doctorado.
"Necesito seguir estudiando y seguir aprendiendo de este arte, para lograr poner un instituto de música. Eso sería como en unos ocho años más, así que igual me queda harto tiempo", explicó este joven loíno.
Por el momento, Esteban, evalúa las posibilidades de sus estudios posteriores, pero seguirá impartiendo estos talleres totalmente gratuitos para la comunidad y en especial para quienes hacen de la música su forma de vivir.