Redacción - La Estrella de Antofagasta

Aunque la intervención de la gastrosquisis no es una técnica nueva, las actuales dependencias del Hospital Regional "Doctor Leonardo Guzmán" de Antofagasta (HRA) permiten coordinar una operación simultánea a dos bebés, movilizando cuatro cirujanos, dos ginecólogos, un neonatólogo, dos matronas, anestesista y el personal de pabellones.

Vanessa Muñoz, cirujana del HRA, explicó que en el antiguo centro asistencial de Antofagasta, el bebé nacía en el quinto piso, luego se llevaba al sexto y terminaba siendo operado en el tercero. "Ahora podemos organizarnos y prepararnos de mejor manera, dada la mayor complejidad del recinto. Esta vez en menos de 1 hora pudimos solucionar el problema a dos bebés (un hombre y una mujer) de manera simultánea".

Para el director del Servicio (s) de Salud de Antofagasta, Héctor Vallejos Pérez, "éstas son las buenas noticias que nos gusta difundir hacia la comunidad. Somos un hospital de referencia de la macro zona norte y la manera en que enfrentamos la gastrosquisis nos permite ir superando nuestros estándares en calidad de la atención, lo que va en directo beneficio del paciente y su familia. La intervención debe ser en las primeras seis horas del nacimiento".

Gastrosquisis

La gastrosquisis es un defecto de nacimiento en la pared abdominal (área del estómago), en el cual los intestinos del bebé salen del cuerpo a través de un orificio al lado del ombligo. "Este orificio puede ser pequeño o grande y a veces también pueden salir otros órganos, como el estómago o el hígado", explicó la doctora Muñoz.

Agregó que "ocurre cuando los músculos de la pared abdominal del recién nacido no se forman correctamente al inicio del embarazo. Esto crea un orificio por el cual salen del cuerpo los intestinos y otros órganos, por lo general, hacia el lado derecho del ombligo. Debido a que los intestinos no están recubiertos por un saco protector y están expuestos al líquido amniótico, se pueden irritar, lo cual causa que se acorten, retuerzan o se hinchen".

Tratamiento

El lactante necesitará cirugía poco después de nacer para que le coloquen los órganos abdominales dentro del cuerpo y le reparen la pared abdominal. Aun después de la reparación, los bebés con gastrosquisis pueden tener problemas con la alimentación, la digestión y la absorción de nutrientes.

Si la gastrosquisis es un defecto pequeño (solo una parte de los intestinos salen del abdomen), generalmente se trata con cirugía poco después del nacimiento, para colocar los órganos adentro del abdomen y cerrar la abertura. Pero si la gastrosquisis es un defecto grande (muchos órganos salen del abdomen), la reparación podría hacerse lentamente, por etapas. Se podrían cubrir los órganos expuestos con un material especial y volver a colocarlos lentamente en el abdomen. Después de que se hayan colocado todos los órganos adentro del abdomen, se cierra la abertura.

Los pequeños con gastrosquisis a menudo necesitan también otros tratamientos, como recibir nutrientes a través de una vía intravenosa, antibióticos para prevenir infecciones y atención cuidadosa para controlar la temperatura de su cuerpo.

Hasta ahora se desconocen sus causas en la mayoría de los casos. Algunos lo adquieren debido a un cambio en sus genes o cromosomas. Mientras que en otros también puede ser causada por una combinación de genes y otros factores, como los elementos con los que entre en contacto la madre dentro del ambiente, o lo que coma o beba, o ciertos medicamentos que use durante el embarazo".

El directivo del SSA destacó el trabajo de los equipos de salud pública, ya que "durante el embarazo se puede detectar con pruebas prenatales para ver si hay defectos de nacimiento y otras afecciones presentes. La gastrosquisis podría dar resultados anormales en las pruebas de detección en suero o sangre, o podría observarse en una ecografía (la cual crea imágenes del cuerpo)".

Dentistas de toda la red asistencial de la región fueron capacitados en el tratamiento inicial de traumatismo craneofacial.

Los cirujanos maxilofaciales del Hospital Regional de Antofagasta, Alejandro Araya, Juan José Cortés y Juan Bugueño, fueron los encargados de entregar las herramientas que ayuden a los equipos de urgencia a tratar rápidamente los casos de traumatismos craneofaciales.

Esto considerando que la región cuenta con una dispersión geográfica que hace necesaria la capacitación de funcionarios de otros establecimientos que se ven enfrentados a pacientes con lesiones en tejidos blandos y duros del macizo facial, producidos por accidentes de tránsito, golpes, caídas, etc.

"Todo profesional que recibe a estos pacientes debe tener los conocimientos necesarios de evaluación clínica inicial, estudio de imágenes básicos, tratamiento inicial, y la capacidad de efectuar una adecuada priorización en la resolución del trauma, en el contexto de la presencia de lesiones de otros sistemas y órganos, algunos tipos de fracturas o algunos signos que puedan arrojar una gravedad de estos traumas craneofaciales", enfatizó Araya.

La epidemiología de los traumatismos faciales ha cambiado en Chile.

Diez años atrás, la gran cantidad de pacientes que llegaba a la urgencia era por accidentes automovilísticos asociados al consumo de alcohol y ahora los pacientes que "más recibimos es por violencia de terceros y caídas, entre otras causas", concluyó el cirujano maxilofacial Araya.