Cobreloa no pudo frente a O'Higgins pero dejó la llave abierta
Los rancagüinos ganaron con solitario gol de Marcelo Larrondo y todo se definirá este domingo en Calama.
Deportes - La Estrella
Con una sola desconcentración se terminó sellando una derrota dolorosa. Cobreloa no pudo con O'Higgins en la húmeda y fría tarde en El Teniente de Rancagua y a pesar de mostrar actitud y disposición, igual pagó caro su único error en la disposición defensiva que el rival supo resolver con la categoría que se supone debía establecer por la diferencia de división entre los dos equipos en cancha.
Se vio bien el equipo de Rodrigo Meléndez en los primeros minutos, aplicando bastante presión en la zona de mediocampo y no dejando que el local, con el preciso juego de Iván Rozas y Ramón Fernández como principal arma tuviera claridad en la salida.
Con Ronald González como agente de descarga y Fernando Barrientos sin complicarse a la hora de manejar a su equipo, el forastero parecía cómodo y seguro en el primer cuarto de hora.
Pero cuando hay partidos tan cerrados entre rivales de distinta categoría se aplica bien el dicho de que "el que pestañea pierde". Fue en una desinteligencia en la marca donde Rozas tuvo el tiempo suficiente para ponerle un pase a la espalda de los centrales, con Marcelo Larrondo entrando en diagonal y con ventaja hacia el arco del portero Maximiliano Velazco. El control del argentino fue perfecto y la definición aún mejor.
Desde allí y con los mineros algo confundidos, Velazco se transformó en la figura del primer tiempo, ahogándole remates de gol a Facundo Castro y el propio Larrondo.
Al frente, sólo el exceso de confianza de Augusto Batalla desesperó a la última línea de O'Higgins, aunque en la más clara, Minoban Becerra eligió rematar incómodo en vez de cedérsela a Luciano Parra, quien entraba destapado.
Con 10
Ya en el segundo tiempo, "Los Zorros" tuvieron un segundo aire en el inicio y otra vez con los desbordes de Ronald González y el desdoblamiento de Álvaro Césped, Cobreloa se impuso.
Primero, con un centro que Luciano Parra desvió por poco y luego con un remate de Minoban Becerra que la defensa mandó al córner y que tras ese centro, Mario Parra desvió con una "palomita" en plena área celeste.
El partido pareció quebrarse con la doble expulsión de Álvaro Césped y Marcelo Larrondo, tras una falta del trasandino y el posterior insulto del minero que generó la airada reacción del delantero. Casi hubo golpes y ambos se quedaron con 10.
Allí, si alguien mereció más fue el equipo de Meléndez, pero como tantas veces, careció de contundencia. La revancha del domingo en Calama deja la sensación de que se puede remontar, al menos en las cifras. Esta vez, la exigencia de salir a jugar será de Cobreloa.
