Redacción / Andre Malebrán - La Estrella

La comunidad de Toconce, ubicada en la zona rural de la Región de Antofagasta, está celebrando un hito significativo en su camino hacia la autosuficiencia agrícola. Un total de 120 predios en el sector alto de Punta Negra ahora cuentan con un nuevo punto de abastecimiento de agua, destinado a facilitar el riego de hortalizas y otros cultivos.

Este proyecto, un anhelo largamente esperado por los agricultores locales, se hizo realidad gracias al apoyo del Fondo Ambiental de Minera El Abra.

El sistema permite a los agricultores cargar estanques, camiones aljibes y otros vehículos necesarios para la distribución del agua, evitando largos trayectos que antes debían realizar para abastecerse del recurso.

Hasta hace poco, los agricultores se veían obligados a trasladar el agua desde el poblado central de Toconce, recorriendo una distancia de 4 kilómetros hasta sus campos, lo que tomaba, al menos, una hora por cada viaje. Hoy, gracias a la instalación de cañerías que conectan con el nuevo punto de abastecimiento, el proceso se ha simplificado considerablemente, aliviando la carga diaria de las familias dedicadas al cultivo.

Proyecto

La comunidad no solo celebra este avance, sino que también mira hacia adelante con optimismo. Actualmente, los habitantes de Toconce se encuentran trabajando en la construcción de un estanque acumulador de agua, que permitirá almacenar grandes cantidades del recurso para optimizar su uso en el riego.

Este es solo el primer paso hacia la instalación de redes de regadío más eficientes, que buscan distribuir el agua de forma directa hacia cada uno de los predios beneficiados, mejorando así la productividad agrícola de la zona.

Leonardo Yufla, presidente de la comunidad de Toconce, destacó la relevancia del proyecto, tanto en términos de calidad de vida como en su impacto económico: "Esto es un sueño y queremos hacerlo realidad. Estamos trabajando hace casi dos años en cómo lograr que estos campos sean cultivables, y en este proceso muchas empresas han colaborado. Una de ellas es El Abra, que no solo ha apoyado este proyecto, sino varios más. Agradecemos su apoyo para un futuro mejor en Toconce, porque en estos territorios nacen las aguas, hay animales, y mucha gente mayor vive aquí en tranquilidad".

Por su parte, Margarita Ayavire, una de las beneficiarias del proyecto, expresó su satisfacción: "Me gusta esto, porque desde el día en que comenzaron a instalar las cañerías sabíamos que iba a cambiar nuestra forma de trabajar. Ahora que el agua ha llegado hasta aquí, estoy mucho más contenta. El año pasado sembré papas, choclo y cebolla, y este año será aún mejor, ya que el acceso al agua es más fácil. Ahora solo tenemos que esperar las distribuciones".

Un nuevo e importante hallazgo se efectuó en el marco de las fiscalizaciones de la cadena de valor de las algas pardas, que realiza el Servicio Nacional de Pesca y Acuicultura (Sernapesca) en la Región de Antofagasta. Lo anterior significó la detección e incautación de 4,2 toneladas de algas pardas, en estado procesado y sin acreditación de origen legal.

Esta vez, el trabajo de los fiscalizadores y fiscalizadoras de la Dirección Regional de Antofagasta se centró en las plantas procesadoras ubicadas en el radio urbano de Tocopilla. En una de las inspecciones se detectaron 3,15 toneladas de huiro negro y 1,05 toneladas de huiro palo, ambos procesados en formato picado ¾, lo que en estado fresco equivaldría a 11,5 y 3,7 toneladas de huiro negro y huiro palo respectivamente.

"Al proceder con la revisión documental, la planta no declaró los recursos en el sistema de trazabilidad y tampoco exhibió la documentación que acredite su origen legal", detalló Pilar Irribarren, Directora Regional de Sernapesca en Antofagasta. El infractor fue citado ante el Primer Juzgado de Letras de Tocopilla.

La autoridad destacó el permanente trabajo de fiscalización realizado por Sernapesca en el puerto salitrero y en todo el borde costero de la región, que cuenta con la colaboración de la Red Sustenta, ya que "nos permite verificar el correcto cumplimiento de la normativa referida a la cadena de valor de las algas pardas en la zona, garantizando la sustentabilidad de los recursos y de la actividad económica".