Despertar tardío de pacientes covid sería forma de proteger el cerebro
Tras la ventilación mecánica, se puede tardar días o semanas en recuperar.
N.E.
Los pacientes con covid-19 conectados a ventiladores mecánicos pueden demorarse días o hasta semanas en recuperar el conocimiento, lo que preocupa a sus cercanos. Sin embargo, un nuevo estudio de la Universidad Cornell (New York), el Instituto Tecnológico de Massachusetts (MIT) y el Hospital General de Massachusetts afirma que esto puede tener un propósito: proteger al cerebro de la falta de oxígeno.
El trabajo conecta el patrón observado entre los sobrevivientes de covid-19 grave con retrasos similares que ocurren en una fracción de pacientes con paro cardíaco.
"Las recuperaciones tardías en pacientes con covid-19 son muy parecidas a los casos raros que hemos documentado en investigaciones anteriores. En este nuevo artículo, describimos un mecanismo para explicar lo que estamos viendo en ambos tipos de pacientes", dijo el autor principal del estudio anterior, dr. Nicholas D. Schiff, coincidiendo con el coautor del trabajo actual, dr. Emery N. Brown.
Según los expertos, los cerebros humanos se protegen a sí mismos, como lo hacen los de animales como las tortugas pintadas, que toleran períodos prolongados sin oxígeno.
Hace más de 10 años, Schiff observó estos retrasos entre pacientes comatosos con paro cardíaco que recibieron terapia de enfriamiento para reducir el daño cerebral causado por la pérdida de flujo sanguíneo. En un caso, un paciente tardó 37 días en despertar, antes de mejorar casi por completo. En la pandemia, Schiff comenzó a ver despertares tardíos similares cuando a los pacientes les sacaban los ventiladores.
En un análisis separado de una muestra de pacientes covid, Schiff, Brown y sus colegas descubrieron que un 25% de los pacientes que sobrevivieron a la ventilación tardaron 10 días o más en recuperar la conciencia. Cuanta más privación de oxígeno sufrían, mayor era la demora.
En el estudio de pacientes cardíacos, los expertos registraron un patrón distintivo en la actividad cerebral, que también se observó en pacientes bajo anestesia profunda.
Schiff leyó que se había observado un patrón similar en los cerebros de las tortugas pintadas, que pueden soportar hasta cinco meses sin oxígeno bajo el hielo en el invierno. Para hacerlo, activan el mismo sistema inhibitorio dentro del cerebro al que se dirigen los anestésicos administrados a pacientes (humanos) cardíacos y con covid, pero de formas creadas por especializaciones evolutivas.