Se realizó la última mesa de trabajo de Mujer Rural e Indígena
La última mesa del año estuvo marcada por las demandas sanitarias. El próximo año seguirá el trabajo.
Redacción - La Estrella de Antofagasta
En el Valle de Puques se llevó a cabo la cuarta sesión ampliada de la Mesa de la Mujer Rural e Indígena, que reunió a dirigentas de Atacama la Grande, Alto Loa y Calama Rural y autoridades del Estado para revisar las materias abordadas en las tres anteriores mesas del año y atender consultas a fin de delinear la agenda de trabajo para el 2023.
La actividad realizada al aire libre partió con una ceremonia de bienvenida llamada "convite" para proseguir con los temas planteados en las mesas de este año efectuadas en Machuca, Caspana y Cucuter, efectuadas en marzo, junio y agosto respectivamente.
En esta cuarta mesa "uno de los temas que han demandado las representantes de las comunidades indígenas fue el permiso de venta de alimentos", dijo Jimena Pichinao, asesora indígena del Ministerio de Salud.
Además, manifestó que que esta "es una instancia muy efectiva para avanzar en cuanto a la implementación pertinente de las políticas públicas y no solamente políticas públicas que estén diseñadas desde los escritorios de los distintos gabinetes, sino que en terreno, con la gente, enterándose de lo que está pasando acá".
Por otra parte, la presidenta de la comunidad indígena de la Puna de Tocor, Alis Celeste y Puques, Patricia Cruz, enfatizó en los avances y desafíos que fueron informados a las autoridades del Servicio de Salud de Santiago "quienes nos anunciaron que puede existir esa diferencia para las resoluciones sanitarias y todo lo atingente a los pueblos indígenas; es bastante importante y ojalá se cumpla. Esperamos que el próximo año eso se vea en concreto, así como la incorporación de nuevos servicios públicos a esta mesa".
Para la profesional del SernamEG, Carola Fuentes Salgado, la regularización de los permisos sanitarios para la actividad comercial y turística fue un tema que abarcó gran parte del encuentro, situación que "esperamos resolver en el corto tiempo, pues esta mesa, que funciona en esta zona desde 2002, ha marcado la pauta nacional en otros temas como fue el reconocimiento ante el Registro Civil del lugar de nacimiento con pertinencia cultural teniendo en cuenta no sólo el lugar donde nació el bebé o donde fue inscrito, sino que también el lugar donde reside la madre".
Otro tema que concitó el interés, aseguró Fuentes, fue la importancia de impartir talleres que prevengan la violencia contra mujeres en los mismos poblados.
Según datos del SernamEG, en la región habita un total aproximado de ocho mil quinientas mujeres rurales y tres mil quinientas indígenas, la mayor parte concentradas en San Pedro de Atacama y prominentemente de la etnia Lickan Antai, debido a lo cual "es determinante llegar a esta población con nuestro mensaje".
Para el próximo año, acordaron realizar la primera sesión ampliada en un día a definir durante marzo y en el poblado de Lasana.
2023 seguirá el trabajo de la mesa en Lasana. Ya se finaron los lineamientos a seguir para el próximo año.